31 de diciembre de 2013
Recuerdo que cuando éramos críos, tal día como hoy nuestra madre nos decía: en la plaza del castillo hay un hombre que tiene más ojos que días tiene el año. La verdad es que no había uno sino varios. Yo llegué a ir, o sea, que piqué. Era una forma de quedarse tranquila mientras preparaba la cena de nochevieja.