domingo, 6 de agosto de 2017

Pobre topito

Sucedió hace siete años en la huerta propiedad de mi amigo Manu. El asunto es que apareció un topo muerto y según dijo, se lo había "cepillado" un gato. La exclamación de mi amigo con la frase simple de "pobre topito", se me quedó grabada en mi cerebro y el paso de los años no ha logrado borrar su huella.
                                       
                                         

Como final feliz de esta historia, el otro día pasando por la librería Elkar de Iruña, me encontré con este sugerente título que tiene que ver con el topito. Hay que tener en cuenta, que a mi amigo ya no le llamo Manu, sino Topito y de momento no parece enfadarse. Al fín y al cabo él me llama a mí como le da la gana. Cuando abrí el libro descubrí que es para niños de tres o cuatro años, por lo que le irá muy bien.



Para terminar el rollo de hoy, os diré que ha caído en mis manos la imagen que os presento a continuación:


Bueno, pues la cosa tiene su miga si os fijáis en el mapa. Aparecen las cuatro provincias vascas perfectamente delimitadas, como parte de la cuarta región de la asociación de radioaficionados de la época, precisamente de 1928. El asunto es que el golpe de 1936 partió la configuración y según pienso yo, más agresiva fue la eliminación de Navarra del mapa vasco, en 1981 al poco del tejerazo. Esto va dedicado a los que en aquellos años hablaban de "entelequia", en referencia al asunto de las cuatro provincias del sur unidas y hoy siguen hablando de "quimera". De todas formas a mí me da igual lo que fuéramos en el pasado, que hasta el más malicioso sabe que esto era un estado independiente. Hay que pensar en el futuro, en lo que queremos ser, y para eso hay que dejar a la gente que decida, que elija. Y ésto, a muchos les produce urticaria, cuando debería ser la cosa más simple, consultar a la gente cómo se quiere organizar, cómo quiere vivir.