Gran Hermano

Buenos días amables seguidores de este blog. El título de hoy no puede ser más explícito: sí, estamos vigilados por el Gran Hermano. Si hasta la propia Angela Merkel, es seguida cuando queda con una amiga para tomar un sándwich de jamón y queso en la Standstrasse, ¿cómo se van a librar el resto de los mortales? Lo del sándwinch, como podréis adivinar, me lo acabo de inventar. Pero lo de que le escuchan sus llamadas, debe de ser verdad. No olvidemos que, todos estamos bajo la lupa de los más variopintos servicios de información, que teóricamente deberían estar a nuestro servicio y en defensa del ciudadano.

Pero los humanos somos raros. No nos importa desnudarnos delante de los estados, que en el fondo y aunque nos parezca mentira, son nuestros auténticos enemigos. Lejos de mis intenciones daros consejos, pero con unos presupuestos escalofriantes para el asunto, es absolutamente imposible escaparse del control de las diferentes policías que pueblan el mundo.

Por eso, cuanto más conozco internet más me gusta la radio. Sí, la radio de hace 70 años. En primer lugar es gratis. En segundo lugar hay pocas aglomeraciones y para mi gusto es más divertido.

Si no queréis que os fisguen, cosa imposible, deberéis tener vuestra casa vacía. Es lo que hago yo, pese a saber que no soy un objetivo de los diferentes servicios de inteligencia.

Hoy es sábado y son las 10,55 de la mañana. El mapa del tiempo que os presento, no está sacado de internet, que es lo fácil. Procede de una estación alemana que transmite en 13.880 KHz. banda lateral superior y en la actualidad, casi es una rareza: los barcos actuales ya no llevan equipos de onda corta, salvo alguna reliquia...