lunes, 29 de agosto de 2022

MAKSIMOV Y SU HIJO IVAN

La foto de la que he sacado el cuadro, está tomada en Solovki, situada en el archipiélago de Solovetsky en el mar Blanco. Una isla apartada perteneciente al Oblast de Arcángel, antigua cárcel de disidentes rusos y otro tipo de delincuentes que eran deportados a lo que se denominaba el Gulag. Hoy en día es una zona donde viven los hijos y nietos de los carceleros y represaliados. Un lugar habitado por sus herederos o sucesores, vaya usted a saber. Un lugar al que me encantaría ir y de hecho ya he ido en forma virtual tanto con Google Earth como con el Flight Simulator, ya que tiene su campo de aviación.

Ya llevo dos cuadros hechos con motivos de esa isla. Lo que veis, además de lo evidente del padre y su hijo en la motonieve, es una zona próxima a la oficina de turismo, al fondo con tejado verde y al denominado Kremlin, fortaleza que fue prisión de exterminio en el pasado y en la actualidad, monasterio de monjes ortodoxos. 

El cuadro, a partir de una foto, me ha resultado bastante difícil de hacer y no me he quedado demasiado contento con el resultado. Pero estamos en lo de siempre: ni vivo de esto, ni mi obra tiene una gran difusión, fuera de los cuatro gatos entre los que estás tú, que lo estás leyendo.



jueves, 25 de agosto de 2022

DINERO

Hace poco escribí sobre los Bancos y  hoy toca hacerlo sobre el dinero, algo que por lo visto es lo único que importa, ya que todo se acaba moviendo alrededor de él. Hay personas que tienen tanto que se pueden permitir donar veintinueve mil millones de dólares, es el caso de Bill Gates, donación destinada a varios asuntos relacionados con la pobreza y el cambio climático. Y empresas de las que te enteras que, de la noche a la mañana, han perdido seis mil millones de dólares. 

Y aquí es cuando Kokodrilo se queda un poco sorprendido. Hay que tener en cuenta que cualquier persona que me esté leyendo simplemente con un millón de euros se las arreglaría para no trabajar nunca. Lo cierto es que, todos sabemos que hay un número de personas a nivel mundial que acumulan cantidades inmensas de dinero.

¿Es realmente tan importante el dinero? Si tienes para vivir, realmente no lo es. Porque descubrimos que el que tiene mucho, pues eso, que igual tiene treinta casas, ocho yates, dos aviones y cuatrocientos coches. Y subiendo. No existe límite. Pongamos que a partir de unos sesenta mil euros anuales, ya es muy complicado mejorar el confort de vida, acorde con los excesos monetarios. 

El dinero es muy tímido y yo que he trabajado en un Banco durante cuarenta años, siempre he visto muchos perfiles de ahorradores. Y uno de ellos es el que no gasta absolutamente nada, vive casi como un mendigo y atesora auténticas fortunas. Otro perfil es el del gastador y a ese, la donación de Bill Gates igual le duraba como mucho un par de años. Porque, no lo olvidemos, igual que hay gente aficionada a ganar dinero, la hay dispuesta a gastarlo.

Y aquí entramos en otra dimensión: la de las personas cuya única obsesión es el dinero. Y al que tienen, sacarle una rentabilidad. El terror a que se vaya devaluando, como realmente ocurre con la inflación. Evidentemente esta gente no vive, pensando obsesivamente en el dinero que, quieren que se multiplique más y más sin límite. Si lo que pretendes es simplemente especular con tus ahorros, a base de inversiones, compras y ventas de acciones, es más que probable que no lo logres, salvo que estés en la cúspide de la pirámide. Pero sí podrás multiplicarlo invirtiendo en empresas que son rentables, que por supuesto las hay y muchas. Pensemos en la industria farmacéutica y armamentista.  

Yo he sobrevivido a varias crisis económicas, épocas en las que la inflación anual era del 10% y los intereses que te cobraba el Banco del 15%. Creo que fui de los pocos que no retiré el dinero cuando la quiebra del Banco Popular el pasado 2017. Y es que, realmente vivimos en un mundo donde impera el miedo. No, no hace falta que te lleves el dinero a casa. Se irá poco a poco devaluando. Por estar en el Banco no lo vas a perder, pero también irá menguando tanto por la inflación como por las comisiones. Con el agravante que el Banco hará dinero y mucho con el tuyo, cuando lo presta. Tampoco te obsesiones por sacar rentabilidad. Supongo que tú que lees esto, no serás del 1% más rico del mundo. Tus ahorros, si es que los tienes, no merece la pena que intentes invertirlos para compensar la inflación. Al fin y al cabo, ese es un dinero que no usas y que puede venir bien para una emergencia. Las inversiones, tienen algo seguro, la comisión que se queda el Banco y algo posible: que pierdas una parte, o incluso toda tu inversión.

Así que vemos que el dinero, algo necesario en la vida actual, no debería preocuparnos demasiado. Sin embargo, esto no es cierto del todo. El dinero da algo que se llama poder. Pero poder casi infinito, donde no cuenta ni el poder político, ni el militar, ni nada de nada. De ahí, que exista una lucha por poseer absolutamente todo, lo cual da un poder ilimitado. Pero ese 1% que acapara toda la riqueza, seguirá en su empeño de conseguir aún más. Son, no lo dudes, los que mandan y manejan el mundo.

El dinero no lo tienen para comprar cosas caras, sino para poder tener esa posibilidad. Recuerdo una anécdota de un señor muy rico de España que le decía a un periodista: a mí el dinero me sirve para saber que determinada cosa, por cara que sea, la puedo comprar pero por supuesto, no la compro. 

Resumiendo diríamos que el poder que da el dinero, está en la cúspide de la pirámide, desde donde se controla todo lo que está por debajo: políticos, empresas, ejércitos, jueces, medios de comunicación, etc. etc. 


Estos 50 euros de la imagen, no son míos




martes, 26 de julio de 2022

BANCOS

Se que me repito, pero no me queda más remedio que insistir, aun a sabiendas que este blog tiene una difusión muy limitada. El asunto tiene que ver con los Bancos y cómo nos hemos acostumbrado a sus prácticas mafiosas. ¿Qué razón existe para que una entidad privada tenga nuestros ahorros y haga negocio con los mismos?. No sólo no nos dan nada por ello, sino que sabemos que tampoco nos pueden devolver el dinero a todos, porque lo han prestado. Y con esos préstamos, sacan su beneficio. Vamos, un morro infinito, una caradura inmensa. 

El Banco es una institución que los humanos, no se por qué, admitimos sin pestañear, a sabiendas que es una de las mayores estafas legales existentes hoy en día: nuestros ahorros que son, no lo olvidemos, nuestros, se los confiamos a una entidad privada que se los queda para luego repartirlos en forma de préstamos. Pero si todos los ahorradores van a por sus fondos, que son suyos, el Banco no te los da.

La razón por la que el Banco no te puede devolver el dinero, es porque no lo tiene, lo ha prestado. Sólo devuelve una porcentaje mínimo de lo depositado y a cara perro. Y de los intereses de esos préstamos salen los sueldos, beneficios, gastos generales, etc. Bueno, yo creo que en realidad todo eso sale no sólo de los beneficios, sino del dinero depositado a modo de una estafa piramidal.

Hoy en día los Bancos se han hecho imprescindibles: abono de nómina, cargo de recibos, pagos por terminal, etc. etc. Por lo tanto, la solución es muy simple: no tenemos por qué confiar nuestro capital a una entidad privada que se lucra con nuestros ahorros. Tu dinero lo tienes en casa o en una entidad pública, cuya única función es mantener el dinero de los contribuyentes. Ese dinero no se   presta, de tal manera que si todos los clientes deciden retirar su dinero, no debería haber problema alguno. En cuanto a la financiación de esa Banca pública, sería con cargo a los presupuestos del Estado, como la Sanidad, Educación, Seguridad Social, etc. etc. 

Rebobinemos un poco y hagamos un resumen de cómo la estupidez humana, incluso la mía, llega a niveles inmensos: le damos nuestro dinero a una entidad privada. No sólo no nos paga ni un céntimo, sino que además nos cobra por el favor. Ese dinero nuestro, lo presta hasta límites que no lo saben ni ellos. Y si todos queremos recuperar lo nuestro, es imposible ya que no lo tienen. Y en caso extremo, el Estado, con nuestro dinero, nos garantiza 100.000 euros, algo de lo que yo, no estoy del todo seguro. 

¿Alguien conoce un timo mejor orquestado a nivel mundial? Yo no y además con las leyes hechas a su medida. Así que este escrito pretende despertar conciencias y exigir a nuestros políticos, que más pronto que tarde, creen una Banca pública y gratuita. 

                                                           



miércoles, 29 de junio de 2022

JULIAN OPIE

Siempre es motivo de alegría, llegar a descubrir algo, tras muchos años de búsqueda (sin insistir mucho). Quizás fue en el año 2004, cuando en un viaje a Madrid por motivos de trabajo, por la tarde fuimos a la feria de Arco. Nada más entrar vi unos cuadros y me dije: ahí va! Pintura de Salaberri y nada menos que en Arco. Cuando me acerco a ver la firma, descubro que era un pintor inglés. Pero de su nombre ni rastro. Como se dice, borrado.  Han pasado diez y ocho años y ayer, mi hijo me insinuó que quizás ese pintor pudiera ser Julián Opie. Casualmente, Julián Opie, tenía entonces los mismos años que tiene mi hijo ahora: cuarenta y seis. 

Uno podría pensar de forma errónea que Salaberri copió a Opie y nada más lejos de la realidad. En primer lugar, hay que tener en cuenta que Opie es muy posterior y además, su obra es una mezcla de fotografía, infografía e informática, o sea imagen tratada por ordenador. El resultado es muy parecido, pero nada tiene que ver. 

Termino diciendo que uno de los síntomas de que te haces viejo es comprobar cómo te acuerdas de sucesos de hace veinte años y olvidas los de la semana pasada.


Julián Opie


miércoles, 22 de junio de 2022

DOWNTON ABBEY

Confieso que estoy devorando la serie. No hace falta decir de qué va la historia, porque es muy fácil saberlo, pero al verla, he vuelto hacia atrás en el tiempo y recuerdo mis tratos con una dama de la nobleza española. Le llamábamos la marquesa, porque realmente ese era el título que tenía un miembro de su familia.

Debido a una serie de desencuentros bastante serios, acaecidos a principios de los setenta del siglo pasado, cortamos nuestra relación y trato (unos cincuenta años sin saber casi nada de ella). La visión de la serie me ha hecho recordar su persona, a la que debería agradecer la previsión que hizo sobre mi futuro, que resultó totalmente acertada, aunque a mí en aquel momento me disgustó.

Gracias a internet y teniendo en cuenta que la nobleza se restauró en España al poco de finalizar la guerra, me ha sido muy fácil encontrar a los miembros de su familia a los que recuerdo de una forma vaga. Memorable la cena a la que fui invitado, el servicio, etc., y establezco comparaciones, salvando las distancias, con lo que aparece en la serie de marras. 

Dudo mucho que la Sra. marquesa lea este blog. Aunque bien pudiera hacerlo. De hecho, yo he nadado en la web en búsqueda de su situación actual y algo de lo que tirar del hilo, hay. 

Os quedaréis, por razones de privacidad, sin saber a qué marquesado me refiero.



sábado, 18 de junio de 2022

INFLACION

Voy a intentar ser conciso y no extenderme demasiado. Hoy, la inflación que se aproxima al 10%, realmente en lo que a nuestros bolsillos se refiere, andará por el 30%. Esto es una impresión totalmente subjetiva y si no estáis de acuerdo, allá vosotros.

¿Qué quiere decir esto? Muy sencillo, como se dice. Si tienes, pongamos por caso, 40.000 euros ahorrados en el banco, ahora tienes 28.000. Hasta el más tonto, con perdón, sabe que le acaban de sustraer 12.000 euros. Sí, así como suena, 12.000 euros levantados. Inmediatamente queremos saber quién ha sido. Pues no lo vas a saber jamás, salvo la sospecha de que, uno de los beneficiados sea el estado, lo cual puede ser un cierto alivio por aquello de que, algo de ese dinero retornará a nuestros bolsillos de una u otra forma. Algún espabilado puede decir: pues entonces saco el dinero del banco si va a desaparecer y lo guardo en casa. Pues va a resultar que aunque lo tengas en casa, la mordida es idéntica. Ojo a los canales de Youtube catastrofistas que te dicen esto mismo de una manera tal, que corres a sacar el dinero del banco y por ejemplo, comprar Bitcoins, ja, ja, ja. Youtube, en algunos aspectos, se parece a los antiguos predicadores: lo único que buscan es tu limosna. La mendicidad cuando se eleva de categoría, se disfraza de muchas cosas, de las que no me atrevo a hablar.

Y es que, desde que el capitalismo consideró el dinero como un bien, no levantamos cabeza. El dinero debería ser un instrumento de intercambio, nunca una mercancía a la que se le pueda aplicar un valor añadido. Bueno, el asunto es que tal como está montado el chiringuito, oímos que la empresa tal ha perdido 58.000 millones de dólares y nos quedamos tan tranquilos. Y no os podéis ni imaginar, la cantidad de mortales que en estos días de turbulencias pierde hasta las pestañas. Y no me extraña. Somos un poco irracionales y si alguien gana alguna vez con la especulación, no os podéis ni imaginar la cantidad de gente que pierde.

El principio del derrumbe, comenzó allá por 1971, siendo Nixon presidente de los EEUU, cuando el dólar se apartó del patrón oro y pasó a ser una moneda denominada FIAT (basada en la confianza). Así resulta que el dinero, no es más que un papelito impreso y vale tanto cuanto vale nuestra fe en el estado emisor. No me atrevo a decir que no vale nada, pero la posibilidad de la especulación sin límites, está servida. De un mundo manejado por el dólar y monedas afines, estamos asistiendo a un cambio hacia otro mundo multipolar, donde el predominio del dólar, desaparece en beneficio de otros actores y otras divisas. En el fondo, la guerra de Ucrania, no es más que un simple acelerador del proceso, nunca la causa.

El cambio se dirige a terminar con el monopolio del imperio del norte y apostar por la economía de las cosas, más que por la economía especulativa. 

Por cierto: los pocos o muchos dineros que tengas, mejor en dos bancos.



miércoles, 11 de mayo de 2022

ANACLETO AGENTE SECRETO

Con el asunto de Pegasus, han salido expertos como hongos. Son los mismos que igual saben de volcanes, guerras o lo que sea. Yo no voy a ser menos y pondré mi granito, como se dice, de arena.

Nada nuevo bajo el sol, pero ahora toca hablar de esto, quién sabe si para no hablar de otra cosa. Estamos dirigidos por los grandes medios de comunicación no me cabe duda alguna.

La humanidad, desde siempre ha sido cotilla y quiere husmear en la vida del vecino. No digamos los Estados. No quiero enredar demasiado, pero desde que se inventó el teléfono, hablar por medio de él es casi más público que hacerlo a grito pelado en medio de la plaza del pueblo.

Los primeros teléfonos móviles, transmitían en la banda de 400 Mhz. muy fácil de sintonizar con un scanner. Luego vino el sistema GSM, que es el que tenemos ahora, en bandas más altas de UHF y codificados. En teoría, sólo en teoría, eran comunicaciones indescifrables, con una protección que decían sólida. Como os podréis imaginar, eso duró un suspiro y al poco ya se vendían equipos con el nombre de GSM interceptor. Eso sí, bastante caros. Equipos pasivos indetectables, que cazaban al vuelo las llamadas telefónicas y los mensajes. Y ya se sabe que, ave que vuela, a la cazuela.

Y ahora este programa, Pegasus, que aunque parezca nuevo, hace muchos años que existe algo parecido: Carnivore desarrollado por el FBI y que permitía el acceso a los ordenadores. De controlar un PC a tener el acceso a un móvil no hay más que un paso. Y es lo que sucede con estos programas que aprovechan vulnerabilidades de los sistemas operativos y se cuelan dentro. 

Yo tengo muy claro que todo, todo, lo que manejo tanto por el móvil como por el ordenador, puede ser espiado, controlado, etc. Así que si tienes algo importante de verdad, no es buena idea guardarlo en el móvil o en el ordenador. Como en general lo importante suelen ser cuatro fotos y cuatro escritos, es muy recomendable tenerlos en un disco duro externo que podamos desconectar a voluntad.

Otro capítulo importante son las cuentas de los bancos. Para eso no hay más que una solución: mirar el saldo todos los días y si hay un cargo irregular, denunciar en comisaría y con la denuncia ir al banco para su posterior reintegro. El fraude más habitual suele ser la clonación de la tarjeta de débito o crédito y su  posterior uso.  Conozco dos casos, muy próximos a mí, de pirateo de tarjeta. Conclusión: estamos expuestos. Si no quieres que te roben, ten la casa vacía, al menos la casa que está en la red.

¿Esto quiere decir que si no queremos que nos espíen, debemos prescindir del móvil? No, nada más lejos de la realidad. Si alguien decide meterse en tu vida, lo hará tengas o no teléfono o pc. Eso sí, le costará un poco más. Incluso "alguien" puede pensar que si en un momento determinado no haces uso del móvil, será porque quieres hacer alguna fechoría.

Hay una página web, www.cryptomuseum.com/index.htm, donde se exponen cientos de artilugios que existen para husmear en la vida ajena. Recordad el caso del famoso escudo de madera en la embajada de EEUU en Moscú, donde Leo Theremin, metió un transmisor de radio pasivo, original de verdad. Viene todo en Google si tenéis interés. Los americanos tardaron siete años en enterarse y por supuesto de auténtica casualidad. Desde 1945 a 1952, los rusos oían todo lo que hablaba el embajador de los EEUU desde su despacho. La genialidad estriba en que, "la cosa", que así se llamaba, no tenía ni baterías ni fuente de alimentación alguna y podría seguir funcionando incluso hoy.

Moraleja: si alguien pretende meterse en vuestras vidas, tarde o temprano lo logrará. Y el mejor espionaje es el que no existe: el capitalismo es feroz y a Pegasus, le ha salido una competencia brutal. Cosas de los depredadores.