lunes, 7 de mayo de 2018

Facebook, twitter....

Lo confieso: hoy me he borrado de Facebook y hace casi un año de twitter. Es una alegría comparable a esos momentos en que decidimos dejar el móvil en la jaula y dedicarnos a nuestra vida. La razón es que los humanos estamos cada vez más enganchados a las nuevas tecnologías de comunicación: antes era un sinvivir ver a todo el mundo hablando por teléfono y hoy es lo mismo pero atentos a la pantalla para responder a las mil tonterías de whasapp, twitter, facebook, instagram.... etc. Y realmente nos privamos de vivir muy buenos momentos por estar pendientes del dichoso teléfono. En mi caso, supongo que habrá personas que tienen contactos más fructíferos en facebook, pero yo lo único que recibía, eran las tonterías que no sirven absolutamente para nada y que corren como culebras por la red. Alguien me preguntará: entonces, ¿para qué escribes en el blog? Pues creo que por el sólo hecho de escribir, porque estoy convencido que son muy pocas las personas que se asoman por aquí.

Agur Facebook. No fue tan bonito mientras duró....

miércoles, 14 de febrero de 2018

Memoria histórica

El año pasado, en Iruña, se comenzó a colocar placas delante de los domicilios de los asesinados en el golpe de estado de 1936.  Cuando paseo por alde zaharra, vengo observando el empeño de "alguien" en retirar esas placas, algunas veces con éxito, como ocurrió con la colocada en la calle San Antón, justo al lado de la Droguería López.

Me llamó la atención el contenido de esa placa: Manuel Quirós Cívicos de 21 años y fontanero, con domicilio en la calle San Antón y de la UGT. Precisamente ser de la UGT le llevó a la muerte. Esa placa, que llevaba tiempo siendo manipulada, fue arrancada en los sanfermines del pasado año.

Está claro, que hoy a mucha gente les molesta esas placas. Y mucho. Aquí los que ganaron la guerra, se empeñan en seguir manifestando que, efectivamente la ganaron y que esto ni es Alemania ni hubo un Nuremberg... Y así nos va.

Ese joven y otros miles, murieron asesinados por sus ideas, por su militancia. O igual, simplemente por ser pobres. 

Al poco de colocarse las placas, unas señoras mayores acompañadas de una monja, me preguntaron si sabía qué era aquello. Cuando les empecé a explicar, una de ellas interrumpió mi discurso para decir que, también en el bando republicano se hicieron barbaridades.

Si os fijáis en la placa, observaréis que está ligeramente girada, presagio de que "alguien", de nuevo, intentará arrancarla.




domingo, 28 de enero de 2018

La vida es un bucle

Cuanto mayores nos hacemos, comprobamos cómo la vida es un auténtico bucle que se repite de forma periódica y mejor que sea así, pues cuando algo se altera, en general no suele ser bueno. Esto desde una óptica pesimista, ya que el cambio puede ser a mejor. Y se me ha ocurrido comparar la vida con el paso del tren por unos escenarios idénticos, en este caso los muñequitos navideños. 

Por otra parte existe mucha literatura en la que se compara la vida como un viaje en tren pasando por diversas estaciones hasta llegar a la no querida estación final. Vaya, hoy no estoy demasiado optimista. Disfrutad con el vídeo. 


T.A.T.: Tren de alta tontería

sábado, 20 de enero de 2018

Room in New York

"Habitación en Nueva York. Pintado en el estudio de Nueva York. Exterior nocturno. En el interior, paredes verde intenso, puerta y mesa de madera de roble. Mujer de rojo vivo sentada de frente, cabeza y hombros girados hacia el piano, tocando las teclas con un solo dedo. Brazos y cuello desnudos, piel muy blanca, pelo oscuro, perfil en sombra salvo la mejilla y el cuello. Hombre rubio en mangas de camisa leyendo el periódico. Sillón tapizado en rosa. Pantalla de lámpara roja oscura que sobresale del piano a la altura de la cabeza de la mujer. Cuatro bloques de mampostería y columna en el exterior (izquierda) bajo el reflejo de la luz. Parte inferior de la ventana en negro".


Hasta aquí las anotaciones de Hopper para la confección del cuadro. La incomunicación entre la pareja es más que evidente y nos recuerda que lo que pasaba en 1932, sigue hoy igual cambiando los medios: ahora, el vivir en una permanente burbuja, viene de la mano de los teléfonos móviles y sus múltiples aplicaciones. 




viernes, 19 de enero de 2018

Las promesas son para incumplirlas

No hace mucho prometí que, jamás volvería a copiar a otro pintor. Y lo que a continuación va, no es otra cosa que otra copia de mi admirado Hopper. También prometí que si un día no pintaba no cenaría. Bueno, pues como soy yo quien pongo las normas, ahora he retirado ese requisito, por lo que si un día no pinto, ceno igual. Y no pasa nada.

Tuvimos un director general del banco, hace muchos años, que dijo una gran frase: los presupuestos son para saltárselos. Este señor, además de ser licenciado en ciencias físicas, fue uno de los que participó en la informatización del banco allá por los lejanos años setenta. Al final le hicieron la faena haciéndole director general, cosa que seguro no le agradaba.

Como disculpa para hacer otra copia de Hopper debo decir que, este cuadro me lo han encargado. Por lo tanto no me puedo negar. Pero los siguientes serán originales, eso seguro. Sigo pintando todos los días desde el pasado día 11 de septiembre, incluso domingos y festivos. No sirve para nada, pero me divierte, lo cual a estas alturas, no es poco. 



jueves, 28 de diciembre de 2017

Casa de Antonio López Torres


Su sobrino, realizó este dibujo a lápiz entre mil novecientos setenta y dos y mil novecientos ochenta y se lo tomó con calma, ya que, según parece lo iba haciendo cuando iba a Tomelloso desde Madrid, donde residía.  En septiembre de 2011 tuve la ocasión de ver el cuadro en la exposición que le organizó el Museo Thyssen  Bornemisza. Y ahí nació el deseo de hacer la acuarela a partir del dibujo y sólo he tardado seis años en cumplir mi deseo. Los hay más lentos. 

miércoles, 27 de diciembre de 2017

Cuento de Navidad

Esto que os cuento, sucedió en la semana santa de 1987. Estábamos en Tomelloso y entonces, los niños, tenían diez y once años respectivamente. Hoy, aún les llamamos los niños y pasan de los cuarenta. Era de noche en un bar de Tomelloso y en TV estaban echando Tiburón 3. Y ahí fue cuando topamos con un pintor, con barba blanca y muy mayor. Enseguida entablamos conversación francamente amena, hasta el punto que el señor se empeñó en que cancelásemos las habitaciones del hotel que teníamos y que fuéramos a su casa. Entonces, 1987, no tenía ni idea que fuera el conocido pintor local Antonio López Torres y tampoco conocía a su sobrino, el famoso Antonio López.

La verdad es que todo quedó en eso, en la conversación. Con el paso de los años, descubres quién era en realidad el señor tan amable con el que mantuvimos animada charla. Por esa razón, cuando vi que su sobrino había hecho un dibujo a lápiz, entre 1972 y 1980, quise reproducir ese cuadro en acuarela, que es el que os presento. No tengo seguridad absoluta de que fuera él, aunque la probabilidad es muy alta. Es difícil que en 1987, en Tomelloso, hubiera dos pintores mayores, muy conocidos por la gente. Ese mismo año, en noviembre, falleció a la edad de ochenta y cinco años. 


P.D.: tenemos el segundo apellido igual. A lo mejor somos parientes, no sé...