lunes, 29 de julio de 2024

PRISA

No, no me estoy refiriendo al grupo de comunicaciones. Aunque también podría ser, pero no. El asunto va de otra cosa. Hubo un tiempo en que las únicas bebidas conocidas, sin contar el agua, eran las derivadas de la fermentación de diversos frutos que daban origen al alcohol. El alcohol producía un cierto relax. Pero apareció el café y eso transformó a mucha gente en hiperactiva. Se había conseguido evitar la somnolencia que producían las bebidas espiritosas. 

Estábamos sentando las bases para la construcción del mundo con prisas en el que hoy vivimos, probablemente por el consumo de estimulantes. El mundo occidental se había vuelto más productivo, más creativo, pero mucho menos relajado.

Una de las pruebas de la vorágine a la que estamos sometidos es la reproducción a doble velocidad de los mensajes de voz de whatsapp, práctica para mi gusto nefasta que hace muy difícil entender lo que nos dicen.

Vivir de forma lenta y pausada es vivir dos veces. El estrés es contagioso, qué duda cabe. Todo el mundo da por supuesto que tenemos prisa: en un bar, en un comercio, en la cola del súper,  en cualquier circunstancia en la que haya que esperar.

Recientemente he acuñado una frase, que como es mía me parece genial: "no tengo prisa, hoy tengo todo el día libre". Y esto es justo lo que me pasó una tarde cualquiera en la cola del súper. En la caja, sólo tenía una señora delante, con poca compra, pero una serie de sucesos encadenaron unos errores fatales en el sistema informático por lo que la fila de dos personas fue aumentando a tres, cuatro, cinco..... La señora visiblemente nerviosa empezó a disculparse. Yo muy serio le dije: "tranquila señora; hoy tengo todo el día libre". Un jubilado que tenía detrás, se tronchaba de risa.

Yo pienso que la civilización occidental es la de la prisa. La oriental tiene otro sentido del tiempo. Lo comprobé en Túnez en 1983, en una estación de tren perdida en un pueblo llamado Sousse. Estaba en la taquilla para coger los billetes y el tren se acercaba. Yo muy nervioso, en mi mal francés, le apremié al funcionario para que se diera prisa. Bien y tú. De eso nada. Cogimos el tren por los pelos. Él con toda su tranquilidad y parsimonia despachó los billetes a la velocidad de caracol, sin olvidarse de los oportunos sellos, sí señor.


La estación


Los billetes

P.D. Sospecho que mi dentista sigue mi blog y amparado en mi eslogan de que tengo todo el día libre, lo aprovecha para intentar cambiar mis citas. Debéis saber que eso de que tengo todo el día libre, es un eufemismo (mirad el diccionario). En realidad, hay días en los que estoy bastante ocupado. Gracias por vuestra comprensión.









lunes, 1 de julio de 2024

LA MENTIRA, EL SECRETO Y OTRAS BAGATELAS

No suelo ver televisión, pero la pantalla está presente en el salón como Gran Hermano. Un día, oí a una colaboradora, presentadora, tertuliana o lo que sea, diciendo: "antes se coge al mentiroso que al cojo". En primer lugar y gracias a que tengo estudios superiores en la sección de letras, entendí que no se trataba de coger al mentiroso físicamente y mucho menos en la acepción argentina, sino que se refería a pillar a alguien en una mentira flagrante. La tesis que venía a decir esta speaker de TV con su frase es que, si alguien miente, tarde o temprano es pillado. Veremos. Porque yo no lo tengo tan claro que a un mentiroso se le pille. Lo normal es que no. 

Vayamos por partes: hasta Santo Tomás de Aquino, decía que la mentira no era pecado, si la pregunta era indiscreta. Podemos mentir ante preguntas que profanen nuestra intimidad. 

Los secretos si los cuentas a alguien dejan de serlo. Cuando tú le dices a alguien de mucha confianza que no cuente algo concreto, en ese momento ese secreto ya forma parte de lo público. Por lo tanto, la única manera de mantener un secreto o una mentira, es no contarlo nunca a nadie.

Por eso es muy difícil saber si algo es verdad o mentira. Al mentiroso no se le puede coger así como así. Pero ahora nos vamos a fijar en la segunda parte del dicho, "antes se coge al mentiroso que al cojo". Y yo me pregunto: ¿hay necesidad de coger a un cojo? ¿No tiene bastante desgracia con su defecto físico para que encima le persigamos? 

No he conocido nunca ni en la realidad ni en la ficción, que un cojo huya perseguido y que al final resulte alcanzado. Eso no puede ocurrir por una razón muy sencilla: los cojos no tienen trabajos que les hagan correr después de su acción, como por ejemplo los ladrones. ¿Alguien se imagina una banda de atracadores que entre sus filas tengan en nómina a un cojo? Es absolutamente impensable. 

Carteristas, gente que se dedica a robar bolsos, etc. no son nunca cojos, por lo tanto no son perseguibles. El dicho, valga la redundancia, cojea por aquí, porque nunca, nunca, hay cojos que huyan corriendo para que alguien los atrape. 

Deberían tener, sobre todo en TV, mucho cuidado en soltar esas frases hechas, que por lo menos me han servido para desarrollar esta entrada, dado que andaba un poco seco de ideas.

Termino con unas bagatelas. En TV, también oí un par de frases, que son absolutas tonterías. Una de ellas, que últimamente escucho de forma recurrente: "es lo que hay". Y la otra: "no estaba sólo bueno, lo siguiente"

La frase de "es lo que hay", se la oí decir por primera vez a mi jefe de personal, sobre los años 2005 o 2006. La soltó y se quedó tan feliz. Me pareció ingeniosa, porque no la había oído nunca. Probablemente la habría escuchado en alguna de las reuniones que hacían en Madrid los jefes de personal del grupo. Pero hoy, cuando la suelta todo dios, llego a pensar que cualquier tontería, al cabo de los años se propaga como una epidemia. Por cierto, al jefe de personal le llamaban director de recursos humanos. Para mí era mucho mejor la anterior denominación, ya que recursos humanos es rebajar a la persona al nivel de cualquier otro recurso, como por ejemplo un ordenador, una lámpara, la fotocopiadora, etc. 

En cuanto a lo de "bueno no, lo siguiente", te hace gracia cuando lo escuchas una primera vez. E incluso te parece frase dotada de cierta chispa. Pero cuando ya se repite de forma cansina en cualquier conversación, es como para escaparse.






jueves, 6 de junio de 2024

PET SHOP BOYS (RECUERDOS)

El otro día me tragué, literalmente pegado a la butaca, el concierto de los Pet Shop Boys, retransmitido por TVE. Una hora y cuarenta minutos, a altas horas de la noche y sin dormirme. Increíble.

Con este grupo, me vienen recuerdos de finales de los años 80, cuando íbamos con los "niños" hacia la Pitutanga y la Frutanga (nombres ficticios para no descubrir el entorno maravilloso que habíamos descubierto en un lugar de Navarra). El coche que tenía entonces traía radiocasette y era obligado poner las cintas que traía Iker. Una de ellas era, cómo no, de los Pet Shop Boys y mi primera reacción fue protestar, gritar que esa música era infumable y la acababa quitando bruscamente.

Pero luego, al ver que hacían versiones de temas de mis tiempos, me empezaron a gustar. Creo que tengo casi todas sus grabaciones, aunque hoy en día decir eso no es mucho, dado que existen cantidad de plataformas para lo que llaman streaming.

En uno de mis magníficos cuadros, incluí un par de pequeñas miniaturas de Neil Tenant y Cris Lowe, que podéis ver más abajo. 






sábado, 1 de junio de 2024

KIWI (CONTINUACIÓN)

 Después de la descripción de este curioso receptor multibanda, es el momento de cumplir aquello de "donde se confirma lo dicho con algún ejemplo". Y para esto nada mejor que los vídeos que podéis ver más abajo.

                                           


Al final he logrado colocar un vídeo con una emisora japonesa que transmite música y me he liberado del espíritu censor de You Tube. Se pasan un poco, porque una cosa es colocar música sin respetar los derechos del compositor y otra el escuchar una emisora de los millones que hay por todo el mundo. He dicho. 




domingo, 26 de mayo de 2024

KIWI

Hoy vamos a hablar del Kiwi. Kiwi es la fruta que suelo tomar en el desayuno. Son muy buenos y yo suelo comprar los más caros, los golden. Pero, ¿a quién le importa si desayuno kiwis o fruta de la pasión?

El asunto es que, en realidad quiero hablar de otro Kiwi. Y no es otra cosa que un pequeño receptor de radio digital que cubre todo el espectro desde 1 Khz. a 30 Mhz. Recibe en todos los modos posibles, AM, FM ancha y estrecha, LSB, USB, CW y modos digitales. Vamos, la repera, hablando de fruta.

El módulo de recepción no es precisamente barato, ya que ronda los 500 euros. Creo que hay instalados en todo el mundo unos 800 lo que parece poco, pero sin embargo es más que suficiente. Hay que tener en cuenta que el que lo coloca, normalmente radioaficionado, no saca beneficio alguno con la instalación.

¿Hoy en día, hay gente a la que le gusta escuchar la radio? Pues la respuesta es que más de la que imaginamos, en este mundo hiperconectado.

Hace poco, el hijo de un amigo me llamó todo entusiasmado porque había recuperado la vieja radio de lámparas de su abuelo. Me pidió algunos consejos y me comentó lo interesante que es escuchar, sobre todo por la noche, la onda corta. Aún quedan muchas emisoras.

Los equipos de radio de cierta calidad no son fáciles de conseguir. Y lo que hace el Kiwi es poner a tu disposición multitud de equipos de recepción distribuidos por todo el mundo. Sólo tienes que tener un PC conectado a internet. 

Así que sin gastarte un euro tienes la oportunidad de tener un receptor de radio en diferentes zonas del globo. Ya he dicho que hay unos 800. No tienes más que pinchar http://kiwisdr.com/public/ y elegir el país o ciudad del mundo que te interese. Cada receptor permite unos cuatro visitantes a la vez y eso te lo indica la página.

El sistema, no puede ser más sencillo: una antena conectada al receptor y dicho receptor, mediante un cable LAN conectado al router. Ni siquiera tiene que tener el ordenador encendido. Ahí más abajo os dibujo el sistema.

En España, creo que hay unos diez. Por supuesto sólo escucháis lo que escucha el que tiene el Kiwi instalado en su casa.






jueves, 16 de mayo de 2024

BANCOS (OTRA VEZ)

Con el culebrón de la posible adquisición del Sabadell por parte del BBVA, viene a mi cabeza el absoluto error de mantener los bancos en manos privadas: nacionalización ya. Lo vengo diciendo desde hace más de cuarenta años y no me hacen ningún caso.

El otro día, oí por la radio a una ministra del gobierno que decía oponerse a la gran concentración que suponía esa fusión, dado que en caso de quiebra, el fondo de garantía no podría responder por el desmesurado tamaño de la entidad.

Ya sabéis que ese fondo, está establecido en 100.000 euros. Un compañero mío de trabajo, trabajé en un banco como sabéis, decía que el gobierno no puede garantizar esa cantidad en todos los casos. 

No hay banco bueno. Pienso que el sistema de creación de dinero de la nada, no nos lleva más que al desastre, mas pronto que tarde.

Si alguien busca un banco seguro, ahí lo tenéis