lunes, 20 de abril de 2020

Confinado estoy (4)

La pereza había invadido mi ánimo, por lo que llevaba sin pintar desde el año pasado. El hecho de haberme quitado el castigo de no cenar en caso de no pintar, había logrado que no hubiese cogido la fina brocha de la acuarela. Pero va y resulta que el confinamiento ha resucitado la necesidad de volver a pintar. Eso sí, bajo la firme amenaza de no cenar en caso de fallar. Así que, tampoco penséis que reanudé la pintura tan pronto, no. Si el confinamiento comenzó un sábado 14 de marzo, mi primer día de pintura fue.... el 31 de marzo. Ahí es nada, como se dice. La obra, ya repetida, es muchacha con guantes, de Tamara de Lempicka. Ya repetida porque fue lo último que pinté en abril de 2019, un regalo para una amiga. Desde entonces, mil escusas me hicieron retrasar el volver a pintar. Fundamentalmente aspectos de índole tecnológico, unidos a otros de vagancia inmensa. El resultado de esta pandemia que nos asola, es el retomar de ahora a fín de año, una serie de proyectos aparcados, por lo que está claro que tengo trabajo para unos siete u ocho meses. 

En cuanto al cuadro, debo decir que hice un par de bocetos. El más pequeño es el que ahora presento y el de mayor tamaño es el que pinté el año pasado.

Mañana día 21 de abril, iniciaré la siguiente obra, que consta de varios apuntes y no tengo la más mínima idea de cómo va a resultar.







miércoles, 15 de abril de 2020

Economia

Llevo varios días pensando, tiempo tengo, en las consecuencias económicas que se van a derivar del largo confinamiento. De economía se habla muchísimo y en general de todo. Y pienso que, pese a la catástrofe que se avecina, no vamos a aprender nada, volviendo a la casilla de salida. Esta crisis nos está dando pistas acerca de la inutilidad del dinero en beneficio de lo que realmente importa, que no es otra cosa que la producción de bienes de consumo, la sanidad, la investigación y la educación. El resto sobra.

Pero la humanidad tiene espíritu y actuaciones más propias de un casino y por eso siempre cae en las mismas trampas del exceso de papel moneda y abrumadoras finanzas. Después de este rollo introductorio, veamos cómo se puede corregir alguno de los grandes errores en los que los humanos estamos enredados.

Bancos: no sirven para nada. El dinero en sí es un medio de intercambio y es la administración quien lo debe controlar. El dinero nunca puede producir dinero. Por lo tanto no existen intereses, ni deudores ni acreedores.

Impuestos: hay medios más que suficientes para que todo el mundo pague y no sólo una parte de la sociedad. Los instrumentos de evasión, sociedades, sicavs, paraísos fiscales, etc. deben desaparecer. Si hay voluntad real, todo puede reducirse a niveles insignificantes.

Renta garantizada. De eso nada de nada. Las limosnas no tienen cabida. Hay trabajo para todo el que no lo tenga y el empleador es la administración si la iniciativa privada no llega. Hay trabajo para todo el mundo. En tanto en cuanto la iniciativa privada cubre esos trabajos, automáticamente el estado deja de hacerlos. Pero siempre el nivel de empleo es del 100%. Pensad la cantidad de cosas que se pueden hacer por un sueldo adecuado.

Con los medios informáticos actuales, es fácil el control. Lo único que hace falta es voluntad. No deberíamos depender tanto de lo que producen otros países, cuando todo se puede producir a nivel local, por lo que hoy tendríamos mascarillas, guantes, respiradores, etc. Sanitarios suficientes, como médicos, enfermeras, celadores, auxiliares. Paralelamente, se debería ir cambiando los oficios improductivos que hoy cobran del estado y mucho, por otros donde su actividad se traduzca en un beneficio para el bien común. No cito los empleos inútiles porque ya lo sabéis.

Tengo un amigo que me dice que la única virtud que tiene el capitalismo es que ha logrado producir de todo, en grandes cantidades y de una forma relativamente fácil. El resto, la especulación, los intereses, la deuda, etc. no son más que entelequias de tahúres y timadores.


Termino con un ejemplo práctico. Ahí tenéis una reproducción de un cuadro de Tamara de Lempicka que he realizado. Alguien se interesa por el mismo y me pregunta por cuánto se lo vendo. Yo le digo que por 100 euros y él me los paga. De esos 100 euros, 20 van para la administración vía impuesto y los 80 restantes son mi compensación por mi trabajo, material y arte. Bueno, esto todo el mundo lo entiende y lo acepta y entra dentro de la lógica de la oferta y la demanda. Lo que ya no se entiende tanto es que si yo le doy un billete de 100 euros a un señor, al cabo de un año me tenga que devolver, pongamos por caso, 110 euros. Eso es totalmente absurdo y la base originaria de todo el desastre económico mundial llamado deuda. Si alguien necesita dinero adelantado, se le da y sólo debe devolver lo adelantado, bien de una vez, bien en plazos a descontar de su sueldo o incluso con bienes equiparables a la cantidad adeudada.


miércoles, 8 de abril de 2020

Confinado estoy (3)

Estos días de confinamiento, sirven entre otras cosas, para desempolvar viejas fotos y ordenar papeles antiguos. Un amigo, me envió por whasapp la foto que veis y de entrada ni siquiera me acordaba dónde estaba sacada. Se lo tuve que preguntar. Resultó ser el estudio donde acabé recibiendo clases de acuarela de mi profesor. Pero creo, que cuando se obtuvo la foto, yo era el experto en radios y televisiones, que de paso se las ajustaba y reparaba. Fue mucho más tarde cuando se enteró que yo hacía mis pinitos con el pincel y me llamó al trabajo, ofreciéndose a darme clases.

Comencé las clases en 1994 y la foto podría ser de unos cinco años antes. Jamás  le dije a José María que pintaba y la verdad es que mantuve el secreto por lo menos durante seis años. Los dos años largos de clases, fueron una auténtica gozada. En honor a la verdad no se si aprendí mucho o poco, pero por lo menos era divertido.

En cuanto a lo de sacar la caja de zapatos con las fotos antiguas, resulta que me estoy encontrando bastante gente que pone fotos de su infancia, unas veces en su perfil y otras en su estado. En estos días hay tiempo para todo, incluso para no hacer nada.

Días de confinamiento. Días que van a ser bastantes más de los que la mayoría piensa. Kokodrilo, cuando el 14 de marzo, sábado, escuchó a Pedro Sánchez, pensó para sus adentros: esto, por lo menos va a durar tres meses. Así que encerrados hasta mitad de junio por lo menos, e igual me quedo corto.


domingo, 5 de abril de 2020

Confinado estoy (2)

Bueno, pues eso. Que seguimos en casa y para tiempo tenemos. Hoy, después de pasar el aspirador y ducharme, me he pesado. Y cual ha sido mi sorpresa, cuando la báscula arrojaba la cifra de 69,9 kgs. Hay que tener en cuenta, que mi peso habitual ronda los 73/74 kgs. Y yo me pregunto: ¿Cómo es posible? Y gracias a mi mente científica, lo he descubierto. He perdido la friolera de unos 3 kgs. en aproximadamente un mes, debido fundamentalmente a que se han eliminado de raíz las visitas a bares, restaurantes y figones. Kokodrilo, como norma, iba un par de veces por semana a cenar o comer fuera. Además también se ha eliminado el amarretako mañanero, al que iba de vez en cuando con mi hermano. 

Por otra parte, descubro que desde el pasado día 19 de diciembre no había cogido los pinceles. La pereza para reiniciar era inconmensurable, por lo que no me ha quedado más remedio que obligarme a pintar, bajo la amenaza de no cenar. Así que he vuelto y hasta hoy día 5 de abril, he cumplido escrupulosamente. Tengo grandes proyectos e ideas para realizar y por supuesto, todo el tiempo del mundo. 

No tengo la bola de cristal ni soy profeta. Pero creo que esto va para largo. El cuadro que estoy haciendo está repetido, ya que fue el último que hice en abril del año pasado. Como podéis ver aún le falta un poco, pero no hay prisa.





jueves, 26 de marzo de 2020

Confinado estoy

Cada uno tiene sus manías y una de ellas es que, por norma general lo que coloco en el blog es de producción propia. Pero en este caso haré una excepción. Resulta que mi amigo Javier, el de los vídeos, además de actor resulta que es escritor. Y ayer me pasó este texto que me gustó y tal cual lo transcribo.

"El planeta Tierra se está tomando la revancha. Se estaba asfixiando. Nuestro crecimiento desmesurado lo estaba llevando al colapso. Cada vez eran más frecuentes sus avisos por medio de huracanes, trombas incontroladas, tsunamis, desertizaciones, incendios, retroceso de glaciares, etc. etc. No le hacíamos ningún caso porque cuando no nos interesa, enseguida argumentamos lo que nos conviene. El planeta Tierra poco a poco está ya respirando mejor. Es poco tiempo, pero lleva un mes que ya está notando los beneficios y ya no le agobian tanto ni el incesante movimiento de aviones en el cielo, ni la contaminación en nuestra superficie. Para ello ha tenido que tomar la determinación de ponernos en cuarentena. De que nos metamos en casa, a pesar de que nos podamos asfixiar, como lo estaba haciendo él, a pesar de que algunos tengan que pagar con su vida, para salvarnos a nosotros y seguir cobijándonos bajo su paraguas, ya que él mismo se estaba muriendo. Mientras tanto en todo el mundo y en su mayoría, estamos consternados, desorientados, atribulados, acojonados. No obstante dos mandatarios de los más influyentes del planeta Tierra manifestaron no tomar medidas drásticas aconsejables en las actuales circunstancias, en aras de no hundir la economía, poniéndola por encima de una gran proporción de muertes que se pueden producir. Curiosamente los mandatarios de estos dos países, allá por el año 2003, formaron parte del trío de las Azores, de triste recuerdo, elevando poderosamente a partir de entonces la inestabilidad de nuestro frágil mundo. Un mundo tan frágil que es capaz de ponerlo en jaque un diminuto ser invisible. Por otro lado la tercera pata del trío huye despavoridamente de Madrid, desoyendo las normas cívicas, para refugiarse en su búnker de Marbella. Aprenderemos????"


Paisaje de Solovki

lunes, 16 de marzo de 2020

El aperitivo

No hay nada como una imagen animada como en este caso, para comprender el alcance de lo que nos está tocando vivir en Iruña. Kokodrilo cumple escrupulosamente lo indicado por las autoridades competentes, pero pese a todo, por razones de fuerza mayor, me ha tocado mover el vehículo automotor y creedme: la sensación de circular por una ciudad tipo Chernobyl es increíble. No me topé con la autoridad, por lo que no hubo necesidad de dar las oportunas explicaciones de mis movimientos. 

Una última reflexión: el pasado 13 de febrero, tuvimos una comida en Bilbao con unos antiguos compañeros de trabajo. Y uno de ellos, Joserra, al que considero una persona con informaciones bastante acertadas, comentó que según una revista rusa, sputnik, consideraban el virus como creado en un laboratorio. Y al poco, Rusia cerró la frontera. No tengo ni idea de más cosas ya que como podréis suponer las informaciones están corriendo más que el virus. Y no todas son fiables. 

Os deseo que lo llevéis lo mejor posible. 


viernes, 13 de marzo de 2020

Antena MFJ 1798 (Final)

A veces me pregunto: esto, ¿realmente le interesará a alguien? Sobre todo en los momentos actuales con la que está cayendo con el dichoso virus. Pero sí, siempre hay algún interesado en esta antena, que es especialmente indicada para tejados complicados como el mío. Es un dipolo, así de simple, por lo que no tengo necesidad de colocar radiales de plano de tierra (esto ya lo he explicado alguna otra vez). Espero que ésta sea la última vez que hago reparaciones en esta antena, ya que la próxima será que la mande a una jubilación bien merecida. 

En el capítulo del funcionamiento lo hace perfectamente en todas las bandas. Otra cosa es que haya gente para contestar cuando llamo (últimamente no demasiado). Me entretengo decodificando lo poco que pillo por aquí o por allá, bien sea en RTTY, FAX o CW. Poca cosa la verdad. Pero la radio de onda corta, sigue siendo para mí fascinante y lo que es mejor, casa perfectamente con cada una de las nuevas tecnologías que van apareciendo. 

Con lo mayor que soy y aún sigo subiendo al tejado. Esta es una afición que tengo desde más o menos los siete años. Y ya ha llovido desde entonces. Ahí os dejo el vídeo.